El arte del regateo

¿En qué consiste el regateo?
El regateo es una técnica basada en el acuerdo entre comerciante y consumidor a fin de conseguir un “negocio” justo para ambos.
Es una estrategia diferente al establecimiento del precio fijo de bienes y servicios, que suele resultar muy atractiva para el turista.

Un momento de complicidad entre comerciante y cliente

Regatear es todo un arte dentro de la cultura árabe. Un momento de complicidad entre el comerciante y el cliente.

Es común encontrar bazares y zocos en países árabes en los que tanto comerciante como turista hablan para obtener un negocio justo a la hora de la compra-venta de artículos.

En la mayoría de comercios de países árabes como Marruecos no se suele poner un precio fijo a los productos, ya que en primer lugar, el vendedor ofrecerá un precio al consumidor que este, podrá rebajar si utiliza adecuadamente la técnica del regateo.

A todos nos gusta pensar que hemos comprado bien, que hemos pagado un precio justo por los bienes que hemos adquirido pero no hay que olvidar que a la hora de regatear debemos valorar el producto y no menospreciarlo ya que el vendedor podría sentirse humillado si ofrecemos un precio demasiado bajo.

Siempre será más gratificante la adquisición de productos basada en las relaciones humanas, en el intercambio de experiencias, en el diálogo y no en una mera transacción económica, fría e impersonal.

¿Cómo regateo de forma adecuada?

La verdad es que no se puede establecer una norma fija como muchos sostienen a la hora de practicar el regateo. No debemos olvidar que esto es un arte y como tal habrá quien lo haga de un modo mucho más sagaz que otros.

Bajo mi humilde opinión, debemos basarnos en el justo medio, es decir, ni ser demasiado exigentes ni muy condescendientes. Y es que, como en todo, tendríamos que aplicarnos el valioso imperativo categórico de Kant que viene a decir “«Obra sólo de forma que puedas desear que la máxima de tu acción se convierta en una ley universal». Por tanto, como consumidores sería muy eficaz ponernos en el lugar del comerciante y pensar: ¿cuánto tiempo, esfuerzo y dinero le ha costado adquirir el producto?, así mismo, debemos sopesar el valor real del bien o servicio en relación con nuestras posibilidades de adquisición del mismo en otros lugares.

El regateo como hemos dicho con anterioridad es algo muy personal y el comerciante pondrá su primer precio tras examinarnos. No es lo mismo un turista español que viene de Madrid que uno que viene de Barcelona ni uno que viene de Italia, Alemania o Francia y esto lo saben muy bien. En función de nuestro atuendo, de si parece que tenemos experiencia en esto del regateo… el precio podrá variar de forma significativa ya que se basan en las posibilidades de consumo aparentes del cliente (cosa que sería muy ética si se utilizase en todos los países del mundo).

Algunos consejos para regatear de forma eficaz en Marruecos:

  • No mostrar impaciencia si realmente estamos interesados en un producto.
  • Pensar en el precio que el producto tendría en nuestro país. Por ejemplo con respecto a España se dice que los bienes y servicios obtenidos en Marruecos deberían costar una cuarta parte menos.
  • No ofrecer un precio demasiado alto ni demasiado bajo, ser prudentes.
  • No comprar si no estamos convencidos.
  • No esperar que vendan el mismo producto al mismo precio para el ciudadano del lugar que para el turista.
  • No mostrar demasiado interés por un artículo o servicio, preguntar por alguno más.
  • No pedir un precio si no estamos interesados en comprar, porque los árabes son excelentes comerciantes y harán que compremos artículos en los que en realidad no estábamos interesados.
  • No devaluar los productos, es decir, no perseguir un precio irrisorio si el artículo o servicio claramente tiene mayor valor.

El regateo es una forma de vivir, una mentalidad, una cosmovisión diferente a la de la mayoría de países capitalistas.

Comprar es un momento único y como tal debe ser una experiencia satisfactoria llena de ilusión y de sentimientos y sobre todo, de interrelación entre personas, de intercambio de opiniones, de visiones y de experiencias, no deberíamos olvidar que somos seres sociales, ¿No es más hermoso hacer del instante de compra algo mágico y no basado únicamente en una transacción económica?

 

Fuentes y enlaces de interés:

– Viajar por Marruecos: “El regateo” (fernando alonso muñoz carballeda)

Link: http://viajarpormarruecos.blogspot.com.es/2008/05/el-regateo.html

– Scotwork (n) negotiation “no confunda negociar con el regateo” (Adam Sands)

Link: http://www.scotwork.es/media/538233/6._negociar_y_regatear.pdf

¿Consultas?